En el Recuerdo de Francisco Igartua:
A VEINTE AÑOS DEL CIERRE DE OIGA
Tras diez largos años de litigios judiciales, hace siete años
la revista Oiga fue recuperada al ciento por ciento. Dicen que los escándalos mantienen su
longevidad aunque pasen los años, y nos ponemos a pensar en ¿cuántos de esos
escándalos fueron denunciados por la revista en sus 33 años de vida periodística?
El año 2010 conmemoramos 62 años transcurridos desde la
fundación de Oiga: Fue a lo grande, especialmente por la presentación del libro
“Francisco Igartua, Oiga y una Pasión Quijotesca”.
Conté con el apoyo de don Fernando de Szyszlo, y de mi amigo
y maestro, Carlos Montori Alfaro… y en el plano familiar con el de mis padres.
Carlos Sotomayor Wendorff, fue el director en el diseño del
libro… gracias a su apoyo desinteresado seguimos en pie… (El libro se terminó
en mayo del 2010, tres días después su casa fue asaltada por desconocidos,
siendo sustraída la computadora Mac que contenía el libro diagramado, por lo
que se tuvo que volver a diagramar).
Aunque la conmemoración de los 62 años de Oiga me dejó prácticamente en la quiebra… sonrío…
porque no nos hipotecamos a nadie… tal como lo había pedido Paco.
La idea era volver a editar Oiga, pero Lima era un caldo de
personajes malagradecidos, que solo buscaban ser los intermediarios para la
venta de la revista, y ponerla en otros manos. Eso no es lo que quería Igartua,
por lo que finalmente, ante la
imposibilidad de sacar la revista, tomé la decisión de viajar.
Mi primer destino fue Santiago de Chile, posteriormente
Mendoza, Buenos Aires y Montevideo… siempre llevando conmigo el libro editado.
Posteriormente a ello el libro fue presentado en Europa y los Estados Unidos de
América.
¿Quién era Paco Igartua para estos vascos del continente
americano y europeo?
En el año de 1995,
tras el cierre de la revista, Paco
participó como invitado al Primer Congreso Mundial de Centros Vascos,
organizado por el gobierno de Euskadi, en Vitoria Gasteiz.
Ante las delegaciones llegadas de todo el mundo, presentó una
ponencia en la que trató sobre el tema de la identidad vasca, y el respeto
mutuo que debían darse entre las personas.
Habló sobre la existencia en la ciudad de Lima, de la
hermandad de Arantzazu (casa vasca –
Euskal Etxea), fundada el 13 de febrero de 1612, por vascos.
Paco tenía entre cejas el proyecto de conmemorar esa fundación,
e hicimos un primer proyecto.
¿Te acuerdas Paco?, en esos tiempos solo estábamos los dos.
El 13 de Febrero de 2014, tras una reunión en el Club
Nacional de Lima, iniciamos los actos de conmemoración por los 400 años de la
hermandad de Arantzazu de Lima.
Los actos académicos se llevaron en el Instituto Riva Agüero,
con la participación de delegaciones de las tres principales universidades del
país vasco y otras especialmente invitadas.
El sembrado de un retoño del árbol de Gernika, fue el acto
final de ese aniversario…
El año 2013, fue el año de tu 90 aniversario… como siempre
Lima se mantuvo indiferente… yo si te recordé… el 08 de Diciembre de ese año,
en la feria del libro de Durango, en el país vasco (en euskera Durangoko
Azoka), presentamos el libro Ezkioga, del P. Antonio María Artola Arbiza C.P, con
el sello editorial de la revista.
No pude estar presente, pero me emocionó saber que en el
pabellón de la Universidad del País Vasco, nuestro amigo común, el distinguido
historiador doctor Oscar Álvarez Gila, hizo la presentación.
A la semana de esa presentación, tú lo sabes, perdí todo,
nuestra oficina fue asaltada y se llevaron todo lo que teníamos.
¿Nos dimos por vencidos?
Pedro Oyanguren de Euzko Etxea de Santiago, nos decía que hay
cierto hierro
gris que se quiebra pero no se dobla, como los vascos.
¡Y heme aquí luchando nuevamente!
El 2014 fue el año de las conferencias internacionales, que
no habían parado desde febrero de 2012, pero pronto me asaltó una preocupación:
¿Cómo se recordarían los 20 años del cierre de la Revista Oiga?, ¿se publicaría
un número especial?
“Amiga Gloria, una vez me dijiste que fuiste la encargada (como
administradora) de entregar las llaves del local donde había funcionado por
última vez la revista… hoy con tu permiso y en tu memoria enciendo nuevamente
la luz”.